Expectativas falsas,
aspiraciones de cristal
tratando de opacar realidades.
Mas vuelven, siempre lo hacen.
Destrozando nuestras ganas,
mudando certezas en dudas.
Nefelibatas juiciosas
como Sanchos cualquiera.
La vida, caprichosa
juega con nosotros
no podemos sino doblegarnos
aceptarla tal cual viene.
Desencanto es lo que espero
no ansío nada más
que me olvide, me rehúya
no recuerde mi verdad.
Acaso me sienta libre
actúe con (cierta) normalidad
Pasar desapercibida mi afán
Mi invocación: un deseo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario