Decepcionada de tantos palos, de tantos
desplantes, de que traten de hacerte sentir un cero a la izquierda. En el otro
lado, mis niños. Mil te quiero diarios. Mil abrazos prohibidos. Mil llamadas de
atención reclamando mi afecto. Les digo una, un millón de veces, que lo tienen.
Que a pesar de mis chillidos, les quiero
con toda el alma. Que estoy orgullosísima de ellos. Que en apenas dos meses son
parte de mí. ¡Si supieran que son mi tabla de salvación! El mundo intenta
opacarme y yo, he aprendido a rasgar el cielo y mirar por un agujerito.
Sobrevivir.
Ilustración
de Ana Novaes
Te amo puri ! eres preciosa, feliz 47! te haria el amor !
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